Siempre la misma estrategia por parte del presidente Lacalle Pou, hacer responsable de sus maniobras políticas al perejil que pone en cargos públicos.
Es el caso de Carlos Albisu, un médico salteño que sorpresivamente, luego de manejar muy mal las estrategias electorales municipales en Salto, regalándole la intendencia al Frente Amplio, aparece en la presidencia de una comisión internacional, que invariablemente ha sido utilizada como comité político del gobierno de turno, como otras.
Todo armado, como siempre, por el Herrerismo, con Penadés y Heber a la cabeza.
Un lugar maravilloso para darles “trabajo” a sus correligionarios, incluso cometiendo el desatino de poner ediles titulares y suplentes.
También en la repartija internacional, acuerdos con el Partido Colorado que en Salto es el senador Germán Coutinho, otros de ese partido también contratados.
El gran responsable es Lacalle Pou y sus ministros, que idearon esto, reitero, como lo han hecho siempre todos los partidos que han gobernado.
Ocurre en la Comisión Administradora del Río de la Plata y del río Uruguay de la misma forma.
El Presidente siempre utiliza el mismo sistema de tratar de evitar que le salpique a él.
Con Astesiano salió a decir que estaba sorprendido, gran mentira, conocía los antecedentes judiciales de su jefe de custodias.
Con Penadés, dijo que le creía a su amigo, cuando en realidad tenía conocimiento de las apetencias sexuales y sus ataques a la moral desde hacía muchos años. Ahora ya poco a poco le fue sacando el traste a la responsabilidad de mantener a un peligroso sujeto en el parlamento, y le soltó la mano, obligándolo a renunciar al Partido Nacional y licencia a su banca.
Y ahora con Albisu igualito, lo hace renunciar, para que sea el cabeza de turco y la cara visible de una maniobra política rechazable.
El Presidente hace mucho debió ser enjuiciado políticamente, debo decir que es muy hábil, y que ha tenido recursos como para salir bien parado en todas las oportunidades y mantener su buena nota ante la población.