El argentino Andrés D’alessandro es un ex jugador de fútbol que cumplió 40 años y debutó en el Club Nacional de Fútbol en un partido por la Copa Libertadores frente a Argentinos Junior.
Y no nos equivocamos, dijimos “ex jugador”, sin querer ser agresivo, ni molestar a nadie, creemos que es realmente así.
Jugó 12 años en el Inter de Porto Alegre con gran suceso, pero, digamos que el equipo brasileño al culminar su contrato resolvió no seguir extendiéndose.
Ya no jugaba en Inter, entraba algunos partidos, pero claramente, no era tenido en cuenta.
No estamos discutiendo su excelente carrera, que fuera brillante desde todo punto de vista, pero eso ya fue, ya pasó, ahora tiene 40 años, y no está en condiciones físicas de interactuar en el fútbol actual.
Y lo demostró en su debut tricolor, que logró llegar a casi los 90 minutos en la cancha.
Es muy inteligente, y corrió la cancha con capacidad, intentando no desgastarse y lo logró en parte.
Pero digamos las cosas como son, ya no tiene ritmo internacional, no tiene velocidad, y menos aún, ese pique corto que desnivelara por la derecha que mostró en toda su carrera.
Trotando la cancha, hablando más de lo que juega, tomando protagonismo para protestar al juez, el argentino fue llenando el ojo al entrenador, y los periodistas especializados, que luego del partido hacían elogios a la actuación del mencionado ex jugador.
El final en la cancha fue el esperado, terminó cayendo al suelo con un calambre, sin poder continuar jugando.
Seguramente lo seguirá intentando, pero el entrenador, que es nuevo, no puede de acuerdo al juego que implanta, jugar con uno menos, sin que pueda estar 100% para cumplir su rol.
¿Cuánto gana D’alessandro de salario?
¿Es una buena inversión de Nacional?
¿Marketing?
¿O realmente los dirigentes que lo trajeron (no lo pidió ningún entrenador) piensan que va a hacer la diferencia?
No quiero pensar, que lo hayan traído porque “es bueno para el vestuario”, como se dice comúnmente.
“Los pingos se ven en la cancha”, dicen los burreros y muchas veces, lo aplicamos para el fútbol; creo que en esta oportunidad, será igual.