Williams Martínez, Edil del Partido Nacional, en recorrida por la ciudad, ha podido constatar una vez más el deterioro vial de la ciudad.
Un claro ejemplo es la intersección de Avenida Bulevar Artigas y Andresito, es realmente desastrosa la cantidad de baches que allí existen.
Es inadmisible que una vía importantísima de ingreso y egreso de la ciudad se encuentre en esas condiciones donde pululan las balizas que el pueblo debe pagar.
A todo esto se debe agregar que el pasaje de vehículos es únicamente por el medio de la senda porque de otra forma se corre el riesgo de caer en una profundidad que será una rotura segura para algún vehículo grande y un grave accidente para algún motociclista como ya ocurrió.
A ello debe de sumarse que las calles con pozos a las cuales se les coloca material caliente no se bituminizan en su totalidad sino que hacen un remiendo que muchas veces dura un día y luego suceden cosas como las descriptas anteriormente. En muchas ocasiones se tapan con tosca que se tira desde encima del camión sin pasar máquina aplanadora alguna, dejando a su suerte la compactación.
Y como nos tiene acostumbrados este Ejecutivo, parece que la prioridad es arreglar algunas arterias, principalmente aquellas donde los votos están asegurados. Los demás… son de segunda.
A todo esto, también la Bancada de Ediles del Frente Amplio es cómplice de esta situación, puesto que dos o tres Ediles oficialistas salen a pasear y recorrer espacios públicos, mientras la Comisión de Obras y Servicios de la Junta Departamental tiene casi doscientos temas y no se reúne desde el 3 de marzo, así como tampoco realiza más visitas in situ desde el 10 de marzo.
Peor aún, dado que según considera el Frente Amplio, no se hace reunión porque no hay tema de urgente solución. Es una tomada de pelo a los vecinos cuando las calles presentan un estado de deterioro y abandono muy importante, siendo que Paysandú tiene una emergencia vial, cuestión que hace bastante tiempo se viene exhortando desde esa banca, puesto que la situación es caótica.
Pero lamentablemente esta irresponsabilidad y desidia es costumbre. Una vez más constatamos que el Frente Amplio es un improvisado en materia de gestión.
5 años de pésimo gobierno donde la actitud déspota es lo primordial.