Agradezco que se haya publicado siquiera un ápice de lo mal del funcionamiento del INUMET.
No obstante, quisiera aportar desde mi experiencia como funcionario, otras irregularidades.
Entre ellas, la falta de autonomía técnica (se hace lo que el jefe dice, de lo contrario se debe realizar informe), la persecución y hostigamiento hacia determinados funcionarios.
De hecho, ante una denuncia, la víctima es marginada por la misma institución, e incluso, las denuncias de acoso laboral quedan en foja cero.
Una en la que se vinculó al MTSS no aparece en el legajo del mando medio, cuando este fue intimado por el ministerio a realizar un curso para trabajar con personal a cargo.
Se experimenta una tensión y precarización del trabajo ya que los mandos medios difunden rumores de cambios (dentro de la institución) y desestiman los problemas que manifiestan sus funcionarios.
A los trabajadores del interior, verbigracia, los amedrentan permanentemente, les comunican que las estaciones van a ser clausuradas y tendrán que trasladarse a cumplir su trabajo a otra.
A su vez, no se respeta sus derechos cuando se dona sangre, o para realizarse el PAP, etc.
En adición, estos mandos medios son elegidos a dedo desde hace ya varias administraciones. Lo cual se corrobora, con la ausencia de concursos para ocupar cargos.
Van a ingresar 22 nuevos asesores, sin calificación en el ámbito y con sueldos elevados.
Por otro lado, denunciar que no hay carrera administrativa desde que se creó la institución. Y algunos cursos son reservados para cierto personal.
Se brindan partidas para ciertos mandos medios por atender a la prensa, realizar tareas extras y demás.
Para colmo, el sindicato ATMN pugna sólo por su interés, haciendo caso omiso a las denuncias de ciertos funcionarios y en el caso de que estas se produzcan, apoyan a su afiliado, que casualmente es un mando medio.
He aquí un breve pantallazo de lo que acontece en la institución, donde una y otra vez, queda todo censurado.