En el día de Navidad, en el informativo de Radio Montecarlo, escuchamos al presidente de la cámara de diputados, hacer declaraciones respecto a los ahorros que el legislativo está haciendo.
Como muy importante logro, Lema menciona la eliminación de las partidas de prensa que cobraban todos los legisladores y ministros.
Incluso en su engreimiento, explica con detalles que cada legislador cobraba por mes $ 33.000 pesos para compra de diarios, revistas y libros técnicos, (eran 31.300), y que eso multiplicado por 150 es una gran cifra mensual ($ 4.695.000).
Lo que dice Lema es totalmente cierto, pero, hay que decirle a Lema, que su jactancia no debería ser tal, porque en realidad en lugar de dar este hecho como una medida extraordinaria en busca de un ahorro, se trata de haber llegado al límite de la desvergüenza y debieron obligatoriamente hacerlo sí o sí.
Y explico porque era obligatorio.
Porque los legisladores estaban cometiendo dos claros delito penal de abuso de funciones y peculado.
El usar un dinero de una partida en otra cosa que no sea lo estrictamente estipulado por la misma es Abuso de Funciones, y usarlo en provecho propio es peculado (la gran Sendic).
Recordemos que incluso, hay testimonios de legisladores que confiesan su delito.
Mieres dijo que se trató de “Una partida para mejorar el salario de los legisladores”, que al preguntarle en entrevista si se trataba de un sueldo encubierto, dijo claramente “si, es un sueldo encubierto”, agregando que “se debería arreglar este tema”.
El hoy intendente de Paysandú Olivera, siendo diputado al consultarle sobre el destino de su partida de prensa, dijo: “La uso para comprar espacios en los medios de comunicación con el fin de dar a conocer mi trabajo legislativo”.
Mientras que el presidente actual de la República consultado sobre lo mismo en la ciudad de Mercedes por el periodista Carlos Hornos de Difusora Soriano, sorprendió al decir que parte de esa partida la usaba para pagarle el sueldo a su encargada de prensa, funcionaria particular del entonces Senador.
Tres casos claros de delitos penales contundentes.
El propio Diputado Lema usó la partida de prensa durante muchos años, y no creo haya sido únicamente para comprar diarios y revistas.
También estos legisladores nombrados ignoraron y encajonaron el pedido de 12.506 uruguayos que utilizando un recurso constitucional presentaron sus firmas solicitando se elimine la partida de prensa.
Esas firmas fueron encajonadas en una comisión, cuando en realidad debieron ser presentadas ante la Asamblea General y transformadas en moción a votar por la misma.
Hasta el día de hoy no fuimos notificados de nuestra solicitud y pasaron ya dos años o más.
Es por todo eso, que creemos que el Diputado Lema, cuando enumera los logros, las Partidas de Prensa y su eliminación no fue un logro, simplemente fue una obligación moral por un lado, y zafar de ser formalizados por delitos penales muy claros.
Debemos decir, que Lema está realizando un gran trabajo desde su cargo de presidente de la cámara baja, y lo apoyamos totalmente, pero no aceptamos que sume como logro la eliminación de una regalía votada por ellos mismos, que representaron 30 millones de dólares desde que se puso en funcionamiento, hasta que se eliminó, que nadie sabe a ciencia cierta a donde fueron a parar.