Antes del Guardián y con el Guardián, todo era manejado por seres humanos, y sin seres humanos no hay Guardián.
Lo que hizo el ministro Heber fue ante la prensa y ante la comisión de seguridad del Estado, repetir como un loro cuales son las formas de funcionamiento del mismo.
Todos conocemos el protocolo, lo que está escrito que reglamenta el uso del Guardián, eso es lo que vine a dar lecciones el ministro del interior.
Pero la realidad y las posibilidades de ser usado sin autorización existe y para eso solo hace falta que haya funcionarios corruptos que habiliten el uso sin autorización.
Heber dice que es imposible utilizar el Guiarán y que Astesiano miente.
Personalmente digo que no es imposible usar el Guardián fuera del protocolo y que comparto que Astesiano miente.
Astesiano, como lo dijo el Senador Da Silva del Partido Nacional, es un charlatán, que hacía ostentación de poder para ganar dinero.
Me inclina a pensar que la mitad o más de las cosas que ofrecía Astesiano, era simplemente la habilidad de un estafador.
Un pobre tipo que se encontró con un poder mayúsculo y lo usó en su propio beneficio.
Un estafador contumaz, un oportunista, un mentiroso patológico, que no solo ahora hace cualquier disparate, sino que lo viene haciendo desde hace mucho tiempo, años que está al servicio de la familia Lacalle y del Herrerismo en espacial.
Recién escuché al presidente Lacalle Pou decir en una entrevista en Maldonado que “Hay que llegar hasta el hueso” y que los que tengan que ir presos vayan presos y los que son inocentes sean inocentes.
También dijo que están colaborando con la fiscal del caso y que quiere que siga esta fiscal.
La fiscal dice que no hay colaboración y que hay todo tipo de trabas en la investigación.
Uno de los dos miente.
El presidente debería ofrecerse a declarar en la carpeta de la fiscalía, ya que es el que más conoce todos los movimientos de su jefe de seguridad.
El verso que no sabía nada no se lo cree nadie, perdón, si se lo cree la fiscal Fosatti que dijo haber visto la gran pena del presidente porque una persona de su confianza la había fallado.
Los rumores e hipótesis de todo tipo sobrevuelan el Uruguay y salen de fronteras.
Que el ministro de comercio de la embajada de Uruguay en Argentina José Reyes tenía contactos con Astesiano y empresarios argentinos.
Que Astesiano era el “Dealer de Luis” que mencionó Beatriz Argimón en su comunicación telefónica como aquel relacionista público.
Hasta versiones poniendo en duda la sexualidad del presidente han recorrido los rumores de redacciones de portales amigos.
Sinceramente no creo en cosas raras, si creo que el presidente cometió un grueso error al nombrar a una persona que conocía perfectamente y sabía que en cualquier momento le armaba un lío grande, como le armó y le ensució su gobierno.
Creo también que Astesiano muchas cosas de las que ofrecía no las hacía y estafaba a quienes les pedían favores.
¿Cómo es posible que el jefe de seguridad del presidente tenga una empresa de seguridad y la ofrezca a artistas internacionales que llegaban a cantar a Uruguay?
¿No sabía nada Luis?
Por supuesto que sabía.
Y por último Luis dice que vio la ficha de Astesiano que tenía averiguaciones policiales y que no tenía procesamientos y condenas con prisión, que lo engañaron.
Sin duda que eso es falso.
Pero, supongamos que es verdad.
¿Vio 31 averiguaciones por estafas, fraudes, tráfico de influencias, tráfico de drogas y se quedó tranquilo?
El presidente mintió y sigue mintiendo.