Hace una semana estuve en mi permanente recorrer el país en la ciudad de Paysandú.
El objetivo de presentarnos en todos los departamentos posibles, es dar oportunidad a la gente a entrenar la libre expresión, el derecho humano más importante del país.
Pero también es intentar relacionarnos con los candidatos a intendentes de cada departamento, conocer sus proyectos y entrevistarlos en lo posible.
Ponernos en el lugar de los votantes, preguntar a fondo y que sirva para que los lectores de nuestro semanario, puedan sacar sus propias conclusiones.
Con el Diputado Olivera de Paysandú, también actual candidato a la Intendencia de su departamento, nos conocimos hace unos años atrás, cuando precisamente, le hicimos una entrevista.
En ella, recorrimos muchos temas, y casi al final de la misma, le preguntamos al diputado Olivera, en que gastaba la plata que cobraba mensualmente por concepto de la Partida de Prensa, recientemente eliminada.
Olivera contestó que él la gastaba en comprar espacios en medios de comunicación, para difundir sus trabajos legislativos.
Le dije que eso no era correcto, que la Partida de Prensa estaba destinada la compra de diarios, semanarios, revistas y libros técnicos.
Agregué que lo que estaba haciendo era ilegal.
A partir de ese momento parece que no le simpatizo al Dr. Olivera.
Igualmente, como no miro simpatías personales, y no tengo absolutamente nada con él. En esta visita a Paysandú intenté por intermedio de un amigo en común, tomar un café con Olivera, limar asperezas de su parte y realizarle una entrevista para mi semanario.
Lamentablemente no aceptó esa posibilidad, pero eso no es lo más grave, Olivera a el interlocutor que actuó de intermediario, le mencionó que yo lo quería chantajear y que no tenía dinero.
Parece que el ladrón cree que todos son de su misma condición, como dice el viejo dicho popular.
Una pena que este muchacho tenga esos pensamientos, jamás le pedí nada, ni nunca le hice llegar ninguna oferta de publicidad siquiera.
No tiene fundamente ninguno para expresar semejante disparate, creo que tiene algún problema en su cabecita que se siente extorsionado, debería ver a algún médico urgentemente.
Seguramente se siente intendente y se le subieron los sumos a la cabeza.
En contrasentido, estuvimos con otros candidatos a la intendencia de Paysandú y fuimos recibidos con gran educación.
No tenemos la culpa que Olivera haya gastado el dinero de una partida en otro rubro, ese es un problema del diputado, no nuestro.
Quizás un baño de humildad le vendría muy bien al diputado.