Se vienen las ultimas semanas antes de elegir nuestro nuevo presidente. Los asesores técnicos trabajan intensamente, tanto de Orsi, como de Delgado buscan encontrar los argumentos para convencer a todos aquellos que no los votaron en las elecciones nacionales.
¿Qué haría yo si estuviera en estas circunstancias asesorando a los dos candidatos?
Primero analizar profundamente cuales son los grupos ciudadanos que están aun no resueltos en que van a votar.
Hubo 118.000 compatriotas que votaron en blanco y anulado.
¿Es mucho no? Sin duda que apuntaría a intentar conocer los principales motivos que les llevaron a realizar una anulación, o simplemente no poner nada en el sobre.
Hay un porcentaje que lo podríamos unir a estos, los que no fueron a votar. Hay 200.000 uruguayos que están ahí, quizás pensando en volver a anular, no ir o votar en blanco.
Hay otro grupo muy importante, me refiero a los uruguayos que no se vacunaron con la polémica vacuna de Covid.
Es verdad que de esos casi 400.000 compatriotas, que no se vacunaron a pesar de toda la propaganda, del miedo, de ver muertes y más muertes, han avanzado mucho a lo largo de los últimos años con documentaciones y testimonios que han colocado en duda razonable a cientos de miles de ciudadanos.
¿Cuáles son las dudas?
¿Las vacunas son las que han originado una creciente cantidad de muertes? ¿Era un plan originar una pandemia con el fin de bajar el número de humanos? ¿Qué había adentro de las vacunas? ¿Qué dice el contrato secreto con los laboratorios que nos vendieron la vacuna? ¿Cuánto fue el costo de las vacunas?
Podríamos continuar por supuesto, hay testimonios de científicos influyentes del Mundo.
Hay médicos uruguayos que atacan la vacunación.
Cualquiera de los candidatos debería encarar este tema antes del balotaje, no tengo dudas.
¿Por qué no prometer y presentar un compromiso de crear una comisión integrada por profesionales de ambas posturas?
¿Por qué no comprometerse a analizar en profundidad el tema vacunas de covid?
Creo que sería muy interesante, no solo para conseguir votos, sino, para que los uruguayos puedan tener una definición sobre un tema que hoy nos divide y mucho.
Olvidemos el término «antivacunas», y digamos que hay una diferencia importante y hay que terminar con la misma, dándole paso a todas las posturas y una sola conclusión.
Mientras 400.000 uruguayos esperan una señal, les interesa darle un palo a Delgado porque le dijo «Bombón» a Ripoll, o comparan a Orsi con Cantinflas.
Elección chata, pobre, sin brillo, sin estrategias, solo queriendo castigar a su rival, lamentable y mediocre todo.