Estoy asombrado leyendo las propuestas de los que serán pre candidatos presidenciales en las próximas elecciones.
Álvaro Delgado quiere subirse al legado de Lacalle Pou.
Laura Raffo aparece de un acuerdo familiar Lacalle Herrera – Juan Carlos Raffo y llega repitiendo las mismas frases que el actual presidente en la campaña presidencial.
Los Colorados ponen a Silva, Gurméndez y Viera en la largada de la carrera presidencial. Los tres con cargos en los últimos cinco años.
Sus propuestas son las mismas que hace cinco años.
Cabildo apuesta a su recolección de firmas en tiempos electorales prometiendo que si firman las deudas del pobre endeudado va a salir de las mismas, una de las más clásicas maniobras que se han visto en los últimos tiempos.
El Frente Amplio, pone a Orsi, Cosse, Vergara y hasta el inútil de Lima en carrera.
Vuelve a pretender ser gobierno apoyado por los errores y actos de corrupción de este gobierno multicolor.
Son los mismos todos, ninguno propone cambios, todos proponen seguir con un Estado gordo comiéndose nuestros impuestos.
Todos apuestan a más de lo mismo.
Delgado hace 35 años está chupando la teta del Estado en todos los cargos posibles.
Hasta Gandini quiere sumarse al escalón presidencial.
Otro que hace 35 años es político profesional.
Viera es el hombre récord en cargos, todos los ha tenido, solo le quedaba ser candidato a presidente, porque a vicepresidente, Senador, diputado, intendente, director de OSE, y Antel, y Ministro fue.
¿Ustedes creen que con estos candidatos vamos a cambiar algo?
Yo creo que no, son esclavos del sistema político, no tienen posibilidades de salir del libreto de tantos años.
Cualquiera de estos que sea el nuevo presidente de la República, deberá inmediatamente negociar la repartija de 3.500 cargos de particular confianza con todos los partidos políticos.
El presupuesto será el mismo, el déficit cada vez más grande, el dólar aguantado para que la inflación no los desborde.
El despilfarro será como siempre delictivo.
Los acomodos en todos los lados posibles seguirán como siempre, y hasta van a seguir inventando lugares para sus correligionarios que hicieron bien los deberes.
En el nuevo Partido Basta Ya pensamos muy diferentes.
Queremos bajar el salario de los legisladores a la mitad y eliminar todas las partidas mentirosas que tienen, y gastos de representación que son sueldos encubiertos.
Queremos eliminar miles de cargos de particular confianza.
Queremos prohibir los viajes al exterior de legisladores sin el más mínimo motivo positivo para el País.
Queremos eliminar los fueros que protegen a delincuentes, y que permite que legisladores, estén por encima de la justicia, escondiendo a sus pares en el palacio Legislativo.
Queremos reforma electoral, que permita eliminar las malditas listas sábanas. Que quien sea electo, sea con votos propios y no, porque tres o cuatro vivos lo pusieron en una lista sábana.
Queremos una Ley Fiscal que no permita gastar más de lo que se recauda, y que no de impunidad para endeudarnos como país, con préstamos internacionales.
Pretendemos que las intendencias no sean un comité del intendente de turno, que la administración sea transparente y no se contrate personal innecesario, ni sigan endeudando con los famosos fideicomisos.
El fideicomiso es un embargo de los ingresos genuinos de las intendencias, algo realmente inaudito.
Hay intendencias que no han necesitado un fideicomiso, porque se han administrado correctamente e incluso tienen una reserva en efectivo en su cuenta bancaria.
Otras están endeudadas hasta dentro de 20 años.
Nuestro Partido está absolutamente seguro que en nuestro país con la recaudación de impuestos actual, administrando y gestionando con austeridad, sin mirar el color político de nadie, sin acomodos y sin corrupción, debería sobrar varios miles de millones de dólares.
Si estimados lectores, cuidando los ingresos actuales y no permitiendo que haya la gran corrupción que hay actualmente en todos los rubros, la plata sobraría en cantidades asombrosas.
La plata está, solo que la roban, la despilfarran, la administran mal, hacen negocios catastróficos.
Si logramos parar toda esta mafia, se podría mejorar sensiblemente la calidad de vida de todos los uruguayos.
Y para colmo de males, los partidos políticos reciben tanto dinero que hacen sus campañas millonarias de publicidad y con todos los chiches con LA PLATA NUESTRA.
Es un círculo vicioso que a simple vista, parece imposible de romper, solo la gente común como nosotros lo puede lograr, si nos unimos a la hora de votar nuevamente.