“Difundir las irregularidades permite su prevención, su control, la lucha permanente por su erradicación y castigo”… afirmó el ex Presidente Sanguinetti… “la transparencia informativa es fundamental”.

“Si alguien vendió los animales prendados pero tiene una camioneta nueva que compró recientemente ¿Lo voy a asistir? ¿Le voy a dar un bono cupón cero?… por intermedio del BROU en los últimos años el resto de la sociedad transfirió al agro más de 500 millones a través de las tasas, que tienen un componente de subsidio importantísimo que lo está soportando el resto de la sociedad”

Dante Buonomo director forista del BROU, “El Observador” página 25, 3 de agosto de 1999

 

Sabemos que detrás del “secreto bancario” el BROU esconde varios cientos de millones de créditos irrecuperables. También sabemos que la mayoría de la cartera irrecuperable son créditos mayores a US$ 100 mil dólares. Muchos de estos créditos no cumplen con las políticas de crédito del banco y pasaron directamente por Directorio en contra de la opinión técnica de los funcionarios de análisis de crédito.

A veces la “irregularidad” es tan pesada que trasciende. Este es el caso de los US$ 4 millones de dólares estafados en la agencia Buenos Aires por el ex director Berriel en complicidad con el Gerente Daniel Genis. La mayoría de los casos se entierran en una carpeta que va a morir al archivo. Nadie se entera, nadie es responsable, nadie investiga. Millones de dólares se van por el agujero sin las discusiones públicas y la transparencia hoy frecuente en las licitaciones.

El secreto bancario es la excusa para ocultar al público la malversación de fondos y la corrupción. Sin embargo la ley de secreto bancario ampara a los depositantes, no a los deudores con causa judicial. Los casos de créditos irrecuperables deben divulgarse. Las causas de las perdidas deben investigarse aclarando responsabilidades, quién firmó, por qué firmó. Se debe investigar en profundidad cada caso que implique pérdida de dineros públicos. El Estado debe tomar la iniciativa y denunciar a la justicia penal todos los casos irregulares y aportar las pruebas. También se debe informar al país lo que sucede dentro de su banco. Si el directorio no realiza estas acciones son responsables de omisión y encubrimiento.

Los episodios de corrupción de los últimos años salieron a la opinión pública por denuncias de individuos decentes y valientes. Estas denuncias llegaron al público a través de periodistas profesionales en diarios independientes. Ninguna denuncia penal se inició por iniciativa de los organismos de control del gobierno. El gobierno solo ha actuado a posteriori bajo intensa presión de los medios de comunicación y cuando la opinión publica conoce las pruebas.

El discurso de Sanguinetti suena hueco, sus palabras nada tienen que ver con la realidad. ¿Dónde está la transparencia en las pérdidas del BROU?

Dante Buonomo como director del BROU era responsable, si el banco no inicia acciones penales contra el que vendió ganado prendado. Es cierto que malos empresarios a veces terminan de gremialistas, pero ¿cómo obtienen créditos en el BROU? ¿Y los Directores del BROU cómo llegan a ese cargo? Acaso son seleccionados por su probidad y capacidad empresarial, o porque son los hombres de confianza y manejan los favores y la caja de los caciques. Y el gremio bancario tan celoso de su autonomía ¿por qué mantiene un silencio cómplice si saben perfectamente lo que está ocurriendo?

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