Nos encontramos con el Sr. Lucas Suárez, quien se desempañara hasta el año pasado como jugador del club Huracán Buceo de la Segunda Divisional B, bienvenido a El Bocón, contamos sobre tus comienzos.

Nací en Montevideo, en el barrio Carrasco Norte, fui al Colegio Lourdes en Malvín, ahí generé mi vínculo de amistades.

“HOY EN DÍA TAL VEZ NO ESTARÍA JUGANDO AL FÚTBOL, EL APOYO DE MIS PADRES HA SIDO FUNDAMENTAL”

¿Con qué edad empezaste a jugar al fútbol?

La primera vez fue con 2 años, mi padre en ese momento estaba jugando en Millonarios de Colombia, yo vivía allá con ellos y me llevaron a la escuelita de Millonarios, ahí fueron mis primeros pasos.

¿Sentiste el apoyo de tu familia en el camino a cumplir tu sueño?

Sí, totalmente, si no fuera por mi familia hoy en día tal vez no estaría jugando al fútbol, el apoyo de mis padres ha sido fundamental.

¿En qué equipos has jugado?

Empecé a los 6 años en Danubio, en la AUFI, estuve ahí hasta los 19 años, hice todas las juveniles hasta que me subieron al plantel de primera división en el año 2015, no llegué a debutar oficialmente pero estuve en el plantel, hice la pretemporada y jugué una copa de verano, pero no tuve la suerte de debutar profesionalmente ahí en Danubio, después tuve unos problemas extrafutbolísticos que me llevaron a estar 6 meses sin jugar por un problema de contrato, esos 6 meses estuve entrenando en Defensor pero no podía competir.

“ESA FRUSTRACIÓN DE NO PODER LOGRAR LO QUE QUERÍA EN EL FÚTBOL LO TRANSFORMÉ EN MI MOTOR PARA SALIR ADELANTE”

¿Y después de solucionarlo?

Luego de esos 6 meses pude fichar en Defensor, donde estuve 1 año, alterné en un par de entrenamientos con la 1era, pero jugaba en la 3era. Después pasé a Boston River, también en la 3era división y después de ahí estuve a punto de dejar de jugar al fútbol, porque entré en un pozo depresivo, tuve un gran bajón, no me salían las cosas, más aún en una edad en la que uno se empieza a hacer muchas preguntas, se te empiezan a pasar muchas cosas por la cabeza que te lleva a generarte muchas preguntas que muchas veces no encontrás respuestas y gracias a Dios, al apoyo de mi familia y mis amigos fue que pude seguir en ese camino, de lo malo intenté sacarle lo bueno y esa frustración de no poder lograr lo que quería en el fútbol lo transformé en mi motor para salir adelante y en 1era división jugué por primera vez en la C, que no es profesional, es semi profesional, fue con 22 o 23 años, en la Luz, donde gracias a Dios me fue bien y pude debutar como profesional en Villa Teresa en el próximo año, ésa fue mi primer experiencia en el fútbol profesional.

¿Hiciste muchos sacrificios para poder llegar a donde estás?

El jugador de fútbol tiene que realizar pila de sacrificios para lograr su sueño, los que más sacrifican son los que más lejos llegan, el fútbol es muy de la conducta, de la disciplina, de saber dejar cosas de lado en pos de tu rendimiento, ése fue uno de los problemas principales que tuve, en su momento no fui muy disciplinado, me costaba un poco el hecho de dejar las cosas de lado por el fútbol, pero gracias a Dios pude hacer un cambio en mi cabeza a tiempo. Cuando sos joven tenés que dejar muchas cosas de lado, me acuerdo la época de los cumpleaños de 15, si tenía un cumpleaños un sábado de noche y jugaba el domingo no podía ir.

“HAY MUCHOS JUGADORES QUE TAMBIÉN TRABAJAN PORQUE TIENEN QUE MANTENER A SUS FAMILIAS”

¿Qué sentiste la primera vez que pisaste una cancha profesional?

La primera sensación que tuve fue en un partido preliminar, estaba en la 3era de Danubio, recién había cumplido los 17 años, se jugaba un preliminar Danubio vs Peñarol en Jardines, era el primer partido que me llevaban a la 3era, fui al banco y tengo el recuerdo de cuando terminó el primer tiempo quedarme calentando con los suplentes, ir al vestuario y cuando salimos al segundo tiempo no lo podíamos creer, estaba llena la cancha, faltaban nuestros 45 minutos del segundo tiempo más 15 o 20 minutos más de preparación para que empezara el partido de la A. Fue un partido que terminó 3 a 3, me acuerdo que tuve la posibilidad de entrar perdiendo 3 a 1 y participé directamente de los dos goles, inclusive me hacen un penal que culminó con el 3 a 3, todos los goles nuestros los hizo Marcelo Tabárez, una hermosa experiencia, no me la voy a olvidar nunca.

“LAS CANCHAS DE JUEGO DE LA C SON POTREROS, LITERALMENTE HABLANDO”

¿Cuáles son las mayores diferencias entre las distintas divisionales del fútbol uruguayo?

Hay una diferencia que es muy notoria entre la B y la segunda divisional B, vos jugando en la B sos profesional y vivís del fútbol, pero la segunda B no es profesional, es una división que es semi profesional, pero también hay jugadores profesionales, además hay muchos jugadores que también trabajan porque tienen que mantener a sus familias y el fútbol no es su principal fuente de ingresos.

¿Y con la infraestructura de las distintas divisiones?

Con la infraestructura hay una diferencia muy grande, salvo algunos cuadros, hay algunos que en la C que están a la altura de cuadros de la B, inclusive hay cuadros que se puede decir que están mejores que algunos otros cuadros de la B, pero capaz que la mitad de los demás tienen una diferencia muy grande, hay cuadros que a veces no tienen ni pelotas, no les dan ropa para entrenar, la mayoría de los entrenamientos son prácticamente escasos. También hay una gran diferencia a la hora de empezar el campeonato, las canchas de juego de la C son potreros, literalmente hablando, de repente hay algún fin de semana como pasó hace unos días, que se jugaron varios partidos en el Charrúa y de repente al siguiente te toca jugar en una cancha que a veces no tiene ni pasto, como si fuera la cancha de una plaza de cualquier barrio, entonces a la hora de plasmar lo que entrenás en la semana se te hace muy difícil, cambian las condiciones todo el tiempo y son paupérrimas.

“HAY ÁRBITROS EN LA C QUE A VECES NO PODÉS ENTENDER CÓMO SE PUEDEN EQUIVOCAR TANTO PORQUE HAY COSAS QUE TE ROMPEN LOS OJOS”

¿Y al momento del entrenamiento también son tan notorias las diferencias?

Sí, lo notas enseguida, en cuanto al profesionalismo de los distintos entrenamientos, la intensidad, el cómo a los jugadores les llega lo que pide el entrenador, en la C a veces hay jugadores que no tienen la capacidad de asimilar la información el entrenador, distinto de los que ya venimos de haber realizado las formativas o el baby fútbol, hay algunos que nunca hicieron juveniles.

¿Qué te parecen los árbitros de las distintas categorías?

Generalmente no hablo mucho con ellos, porque son parte del fútbol y además es un ser humana, se puede equivocar como se equivoca el jugador, que puede errar un gol, o hacerse un gol en contra, pero creo que hay una gran diferencia también entre los árbitros de las distintas divisionales, hay árbitros en la C que a veces no podés entender cómo se pueden equivocar tanto porque hay cosas que te rompen los ojos, pero trato de no meterme y no opinar mucho con ellos.

¿Qué partido sentís que te marcó más como futbolista?

Fue el primer partido que jugué como titular como profesional, con Villa Teresa, nunca lo voy a olvidar, porque debuté como suplente entrando en un partido contra Atenas, donde jugué poco y una o dos fechas después jugué de titular contra Central, donde jugué todo el partido.

“HAY CUADROS EN LA C QUE NO TE DAN NADA, EL MISMO FUTBOLISTA DEBE ARREGLÁRSELAS”

¿Cómo es el acceso hacia las canchas y las zonas de entrenamiento?

En el fútbol profesional es como se ve en la tele, concentrás y vas en un ómnibus hacia la cancha, pero en el fútbol de la C eso es más que nada individual, te dicen jugamos tal dia en tal cancha y tenés que llegar como puedas.

¿No te dan viáticos?

Hay algunos cuadros que sí, jugando en Huracán Buceo tuve la suerte de poder vivir del fútbol y dentro de mis mayores o menores posibilidades lo he podido hacer, pero hay cuadros en la C que no te dan nada, el mismo futbolista debe arreglárselas.

“EN LA C NO HAY RESPALDO NINGUNO, ESTÁ COMO MEDIO ABANDONADA LA DIVISIONAL”

¿Cuál es el sueldo aproximado de un futbolista de la B y la C?

En la B ronda los $ 22 mil pesos, mientras que en la A el mínimo es $ 47 mil pesos, hay una diferencia muy grande. En la C mientras tanto no hay contratos, eso se arregla directamente con el club. Hay algunos que ni siquiera cobran un sueldo y lo hacen por amor a este hermoso deporte.

¿Sentís que la AUF está comprometida con las divisionales profesionales?

En la A y en la B obviamente que sí, pero en la C no hay respaldo ninguno, está como medio abandonada la divisional.

¿Tan grande es la diferencia?

Es una diferencia muy grande sí, la verdad es algo que uno no entiende, porque la divisional C también debería ser profesional, si en un año un cuadro disputa la B y la va mal desciende de categoría, pero no por eso dejan de ser profesionales, acá hay solamente 3 divisionales, ¿no es posible hacerlas profesionales a las 3?

“SIENDO UN PENDEJO TE CREES QUE TE LAS SABÉS TODAS Y EN REALIDAD NO SABÉS NADA, NI DE LA VIDA, NI DEL FÚTBOL, NI DE NADA”

¿Le dedicás tus goles a alguien en especial?

A Dios.

¿Qué les dirías a los más jóvenes que buscan iniciarse en el mundo del fútbol?

Que escuchen, que sepan escuchar a los más experientes, a los que les dan un consejo en una buena, a mi siempre me costó mucho escuchar, porque hay muchos momentos que siendo un pendejo te crees que te las sabés todas y en realidad no sabés nada, ni de la vida, ni del fútbol, ni de nada, pero te pensás que te comés el mundo, a todos ellos mi humilde consejo es ese, que aprendan a escuchar.

Muchas gracias por esta hermosa charla.

Muchas gracias a vos.

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