De eduardo@abenia.net

 

Carta abierta al Sr. Presidente de la República Dr. Luis Lacalle Pou:

Esta no es la primera carta que le escribo, pero quizás si la última, no tiene gracia hablar a la pared, no es la idea que termine siendo solo un desahogo. La escribo pensando que quizás la soledad del poder le ha generado una sordera selectiva, que le impide escuchar a los que lo pusimos en el cargo que ocupa, así que ésta, más que carta, es un grito, a ver si ahora escucha. Sepa que sus votantes nos sentimos engañados, frustrados, indignados, traicionados. Así, muchos no volveremos a darle el voto, ni a Ud., ni al partido de la Sra. Argimón y de tantos otros seguidores de los mamarrachos que heredamos del FA. Si no hay otra opción, en balotaje, antes que FA, votaremos en blanco, pero no vamos a seguir legitimado la traición a nuestros valores. Nos prometió austeridad republicana, pero se subieron los salarios ya impúdicos de las jerarquías del Estado. Se achicaron algunos gastos escandalosos, pero se agregaron otros. El Estado sigue engordando, sumando cargos de confianza, haciendo cada vez más intolerable el peso que soporta el Uruguay Productivo. No bajaron las tarifas de los Entes Públicos, ni impuestos, ya no se soporta. Somos conscientes del peso que significa la pandemia, pero se siguen gastando fortunas en cosas innecesarias, como oficinas para tratar un problema de género que solo existe porque lo crean, restando valor a la familia. Se sigue manteniendo parásitos a todos los niveles de la “cultura” y el “arte”. Los cargos de gobierno se siguen llenando con cangrejos rojos y floristas, en lugar de técnicos como se prometió. Siguen los mismos vicios que nos trajeron 15 años de oscurantismo. Continúan entregando la tierra, el agua y el aire a una multinacional extranjera, perpetuando el modelo forestal/celulósico que maximiza la despoblación de la campaña y la extranjerización de la tierra, vendiendo el rico patrimonio de los orientales al bajo precio de la necesidad, a una promesa de trabajo que termina siendo para empresas extranjeras. Puro cuento. No haber aprovechado la oportunidad de renegociar el contrato ROU/UPM2 fue lastimoso, cipayo y entreguista. Nuestros nietos pagarán, deuda mediante, fortunas por un tren que se construye para usufructo de una empresa extranjera, tras una negociación oscura con aspecto delictivo, que debió revisarse o mejor aún anularse. La estafa del cambio de valor del canon a pagar por Km recorrido es una muestra del grado de irresponsabilidad, cuando no delito, con que se manejó todo el negocio. Seguimos pagándole una pensión a los terroristas, incluso en condiciones privilegiadas a su familia, y encarcelando a los que defendieron las instituciones. Un anciano enfermo, en silla de ruedas, se acaba de partir el corazón de un tiro, cansado de ver tanta injusticia sin que Ud. o el gobierno que votamos haya hecho nada. Mientras tanto, siguen libres los que se cansaron de meter la mano en la lata. Sabíamos que su antecesor no dejaría ningún manco, pero esperábamos más de Ud. De vergüenza, debería bajar esa mirada altiva con la que suele aparecer en las fotos, estamos cansados de poses, no nos llena el ojo comiendo con la tropa o con obreros de la construcción, está bien, pero no alcanza, queremos hechos, coraje, justicia, un gobierno valiente, que tome las medidas que todos sabemos que son necesarias. Hoy nos sentimos gobernados por un FA caviar, un FA con desodorante. Para una mala copia es preferible el original, así al menos tendremos al enemigo a la vista, no como ahora, escondido en nuestra propia casa. Reaccione, lo necesitamos. ¡¡¡ES AHORA… O NUNCA!!!

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