El sistema político no tiene color político, son todas las mismas porquerías.
Es así, no hay con qué darles, siempre buscan la forma de usar nuestro dinero para hacer sus campañas políticas, y acomodar a sus dirigentes en cargos innecesarios.
Parece mentira que pedíamos a los gritos un cambio de los 15 años del Frente Amplio gobernando, y cuando llega, es más de lo mismo.
Por todos lados utilizan el dinero que recaudan de los impuestos más caros del mundo para pagar sueldos enormes a sus dirigentes que quedaron fuera del parlamento de los organismos públicos.
Ahora le llegó la hora al economista Pablo Ferreri, ex director de la DGI en gobierno de Tabaré, hombre que pertenece al equipo de Danilo Astori.
Estuvo en el Ministerio de Economía.
Apoyó a Daniel Martínez para las elecciones departamentales por Montevideo.
Muchos lo recuerdan por la sospecha que su ex socio nos contó, respecto a su participación como contador de un importante cambio de Montevideo, cuyo dueño terminó preso por lavado de 25 millones de dólares provenientes de Perú.
Y ahora, quedó con las manos vacías, es decir, que no logró los votos para ser electo y entonces, la intendenta de Montevideo Carolina Cosse, resuelve contratarlo con un voluminoso salario mensual.
Y como este es el país que no pasa nada, que todo vale, que el presidente Lacalle Pou entregó más de 500 cargos públicos luego de ganar la presidencia, como pago a los que lo ayudaron a ser presidente.
Hasta le entregó 44 cargos importantes al Frente Amplio, al mismo que destrozaron en las campañas electorales.
Los únicos giles, somos los uruguayos honestos, los que pagamos nuestros impuestos.
Ellos se cagan de risa de todos nosotros, somos la gilada, los que hacemos el gran esfuerzo de producir, para que ellos la despilfarren y les den cargos a sus amigotes por la sencilla razón de hacer acuerdos políticos.
Felicitaciones Pablo, bienvenido al club de los acomodados políticos, nosotros te vamos a pagar tu salario, buen trabajo.